La ‘startup’ navarra Abanza, que desarrolla dispositivos e instrumental médico para el sector artroscópico de reparación de tejido blando, cerró una ronda de financiación por valor de 1,2 millones de euros, liderada por Sodena y Clave. En concreto, la sociedad pública dependiente del Gobierno de Navarra invirtió 350.000 euros y, además, capitalizó un préstamo participativo de 40.000 euros concedido en 2017, según informó este miércoles a través de un comunicado.

Por su parte, la gestora navarra de inversión Clave realizó una aportación desde su fondo UN I+D+i Tech Transfer. A la ronda también acudieron nuevos inversores industriales nacionales e internacionales con conocimiento y experiencia en el sector en el que trabaja la citada ‘startup‘. Según indicó Juan Abascal, cofundador y consejero delegado de Abanza, gracias a esta operación podrán disponer de un equipo “con vocación internacional, con una capacidad de crecimiento rápido y una importante propuesta de valor”.

Desde la compañía aseguraron, además, que destinarán parte de los fondos obtenidos a agilizar su entrada en el mercado europeo y avanzar en la comercialización de sus productos en Estados Unidos. También los emplearán para reforzar su propuesta de valor “en nuevas soluciones innovadoras y disruptivas en el sector artroscópico” para que los servicios médicos puedan ofrecer a sus pacientes “una recuperación segura y efectiva”.

INNOVADORA SOLUCIÓN MÉDICA
El plan de negocio de la compañía también contempla aumentar su actual plantilla, formada por siete personas, a un total de treinta empleados para el año 2026. Un incremento que requerirá la incorporación de profesionales con perfiles de ingeniería (sobre todo, biomedicina, mecánica y desarrollo de producto), así como especialistas en legislación y marco regulatorio, marketing y ventas.

La firma navarra es la creadora de WasherCap, el primer dispositivo de fijación para operaciones de ligamento cruzado anterior (LCA) de la rodilla que no depende de la calidad ósea del paciente. Dicha solución ha iniciado su comercialización en España de la mano de “personal médico referente en medicina deportiva con excelentes resultados”. Actualmente, la lesión de ligamento cruzado anterior es una de las más comunes, ya que cada año se registran uno 2,6 millones de traumas de este tipo, de los que un millón requieren una reconstrucción íntegra.